Thriller del año 1992 dirigido por Abel Ferrara y protagonizado por Harvey Keitel
La historia se centra en la vida de un teniente de policía de la ciudad de Nueva York quien aparentemente lleva una vida normal con su familia y un trabajo estable, sin embargo como toda persona este debe lidiar con problemas personales como la adicción a las drogas, al sexo con prostitutas, la corrupción y las grandes apuestas que lo llevan a un abismo de miseria y desconsuelo, haciendo de este reconocido hombre de ley un completo despojo humano, durante el transcurso de su rutina diaria se le asigna una investigación que involucra la violación de una monja en una iglesia a manos de un par de gamberros puertorriqueños (bueno, digamos que son latinos para no generalizar, no vaya a ser que me demanden por racismo mal infundado) por lo que vale resaltar que esta escena resulta bastante blasfema ante los ojos susceptibles, por lo que deberá centrar sus conocimientos policíacos para dar con la captura de los criminales, pero como se mencionó anteriormente sus problemas personales le harán pasar un mal rato hasta el punto de querer contemplar el suicidio, no sin antes finalizar una tarea pendiente y encontrar algo de redención.
El film muestra a Harvey Keitel en una gran faceta actoral ya que hace que toda la situación sea muy creíble y dramática a medida que se desarrolla la película y mas para una época donde se muestra una perfecta decadencia, la cual se plasma perfectamente en las escenas aquí planteadas, ya sean de naturaleza sexualmente sugestiva o hasta de un jodido día de trabajo, donde lo único que te ayuda a mantener una horrible depresión es una botella de Borbón y un par de mujerzuelas en la cama, algo muy importante para recalcar aquí es la forma en que se cuenta una historia agobiante a través de los ojos de un policía que siempre debe lidiar con lo peor de lo peor en una ciudad de más de 4 millones de habitantes dándole un valor agregado al estrés que se vive allí. A pesar de ser una película los amados 90 aun posee muchos elementos de la década previa a esta como la vestimenta de las personas e incluso algunos puntos de infraestructura transportando al espectador a esa época que por momentos puede ser nostálgica, sin duda es un film para tener en cuenta si se quiere disfrutar de una buena tarde de sábado o domingo frente al televisor. Así que si piensas que tu vida es un asco solo quédate a ver esta historia y descubrirás que las cosas no están tan mal después de todo.
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